Ejercicios para los senos
Tener una buena talla de senos es uno de los sueños más comunes entre las mujeres; hoy en día la mastoplastia es una de las operaciones quirúrgicas más demandadas, incluso entre las adolescentes de catorce o quince años.
¿Por qué nos atraen los senos grandes?
Los psicólogos y antropólogos han analizado las razones de este fenómeno, y casi todos están de acuerdo en asociar la figura de un seno robusto al fenómeno de lactancia y procreación que un hombre, inconscientemente, busca en una mujer. El deseo de la mujer de aumentar el tamaño de los senos se vería estimulado por la voluntad de dar cabida a esta percepción masculina que une la feminidad y la atracción sexual a la capacidad de hacer nacer y criar a la prole.
Ejercicios para senos, ¿son realmente eficaces?
Antes de la llegada de la cirugía plástica, existían multitud de consejos acerca de ejercicios que prometían aumentar el tamaño de los senos. Básicamente, los enfoques eran tres:
El primer enfoque recomendaba aquellos ejercicios que fortalecían la parte superior del cuerpo para aumentar el volumen del seno. Esta estrategia estaba avocada al fracasado, porque la mama está formada en un 80% de tejido adiposo, mientras que el resto lo constituyen tejido conectivo y glándulas. El ejercicio puede aumentar el volumen de los músculos, pero no la grasa, de hecho, la quema y reduce. No hay, pues, en este sentido, ejercicio físico para los senos que consiga este aumento deseado.
El segundo enfoque estaría destinado a fortalecer los músculos pectorales con el fin de aumentar el tono y el volumen. Los músculos pectorales están debajo de los senos, por lo tanto un desarrollo de estos músculos supone un aumento general del volumen y, por lo tanto, una elevación de la mama. Este ejercicio aunque es muy aconsejado por algunos expertos, se desaconseja insistentemente por otros; la explicación es sencilla: si la mujer sigue este entrenamiento con mucha entrega y regularidad, puede alcanzar un desarrollo desequilibrado de los pectorales (respecto a otros músculos del tronco, como por ejemplo los dorsales), con esto se arriesga a empeorar las cosas desde un punto de vista estético porque se produciría un efecto de descolgamiento (o un excesiva definición del músculo) entre las mamas y unos pectorales demasiado desarrollados.
Además, del efecto estético este ejercicio también implica un riesgo funcional también funcional, si solo practicamos ejercicios de empuje (que implican principalmente pectorales y tríceps), en detrimento de los de tracción (espalda y bíceps), nos arriesgamos a sufrir desequilibrios(una cadena muscular más fuerte y otra más débil) que pueden causar dolor y lesiones en las articulaciones. Por esta razón, son muchos especialistas los que se muestran muy reticentes y recomiendan como más segura la tercera opción.
Este tercer y último enfoque dentro de los catalogados ejercicios para los senos, persigue tan solo mejorar y corregir la postura evitando que los hombros se inclinen hacia adelante y se hundan, en este proceso se ven involucrados este también a los senos; esto se consigue entrenando los músculos de extra-rotación del brazo, que son aquellos que llevan hacia atrás y hacia arriba los brazos, unos músculos pequeños en la articulación de los hombros.
Conclusiones
Como hemos visto, la primera estrategia carece de fundamento científico, pues no existe ejercicio físico alguno que estimule ese tejido adiposo de las mamas (salvo engordar). La segunda, que persigue potenciar los pectorales, ejercitada de forma abusiva, puede dar origen a problemas estéticos y funcionales. Solo una actividad limitada con una baja carga para entrenar los pectorales, sin más pretensión que la de tonificar y conseguir una discreta masa muscular, puede tener sentido, especialmente con el paso de los años.
Debemos recordar que los pectorales son músculos fundamentales en la ejecución de muchos gestos cotidianos de los brazos, un buen nivel de entrenamiento es importante y nos ayuda a combatir dolores y lesiones que podrían aparecer con el paso de los años y la pérdida de la masa muscular. Estos ejercicios son eficaces, muy recomendados y privados de contraindicaciones, pero estemos alerta y no nos dejemos engañar, su objetivo no es el de aumentar una talla de sujetador, simplemente mantenerte tonificada.